Una vez cruzando la montaña La Rumorosa, el agua se almacena en la Presa El Carrizo, la cual tiene una capacidad de 40 millones de metros cúbicos. De ahí el agua se manda a la Planta Potabilizadora El Florido, ésta tiene la capacidad de potabilizar 4,000 Its./seg. en dos módulos de tratamiento de 2000 Its./seg. El módulo dos sólo tiene filtros, esto debido a la baja turbosidad del influente. Esta Planta está constituida de acuerdo a la tecnología DEGREMONT, contando con adición de productos químicos flocultantes, clarificación en la unidad llamada pulsador y filtración rápida, esta prevista también de pre y post cloración. Desde esta planta se conduce el agua hasta los centros de consumo de la ciudad, como son las casas, los hoteles, restaurantes, escuelas, hospitales, parques, y toda el agua que se abre en las ciudades de Tijuana y Playas de Rosarito.
Después, las aguas utilizadas en hogares, industrias y comercios (aguas negras) se recolectan a través del sistema de drenaje sanitario y son enviadas a la Planta Tratadora de Punta Bandera para someterlas a un proceso de desinfección, culminando su trayecto en el mar.